Ahora Macri invita Carrió a formar la alianza antiperonista con Sanz de vicepresidente
Ahora Macri invita Carrió a formar la alianza antiperonista con Sanz de vicepresidente
Hace unos meses fue Elisa Carrió quien dio el puntapié inicial al tratar de incorporar a Mauricio Macri a la coalición FAUNEN, lo que motivó la crítica de Hermes Binner y los socialistas, Libres del Sur el GEN y casi todos los principales dirigentes de la Unión Cívica Radical. Sin embargo, especialmente en el último mes, con la suba en las encuestas del jefe de gobierno (varios encuestadores le dan el 17%), no sólo Carrió decidió apoyar la candidatura presidencial del ex presidente de Boca sino también Ernesto Sanz, Oscar Aguad, Coti Nosiglia, José Cano de Tucumán, Roberto Burrayle de Formosa y varios dirigentes importantes del centenario partido se han rendido ante el avance en las encuestas del líder del PRO.
Cada vez menos prejuicios
Cobos es el más importante de los dirigentes radicales que quiere una interna con Macri, en tanto los que se opusieron desde el principio, como los socialistas, Libres del Sur y GEN, no quieren saber nada de realizar una PASO con el PRO. A Cobos lo acompañan Ricardo Alfonsín y el grupo que responde a Rafael Pascual, ex presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, y casi toda la segunda línea de dirigentes importantes aceptan a Macri en las PASO. Asi las cosas, hay un camino hacia una fórmula entre Macri y Ernesto Sanz, el presidente del comité nacional de la UCR, como vicepresidente, lo que llevaría en las PASO a un enfrentamiento con Cobos y Binner. Aunque no lo quieran, decir la vieja historia de que Macri es un límite ya no va más y ahora prima el pragmatismo. Así es que creen que es imprescindible nuclear a todo el antiperonismo como bandera de campaña. Ésta es la consigna en estos tiempos difíciles para la Argentina, donde reinan la inflación, la recesión y la corrupción. Este estandarte está claro en las redes sociales y apunta a que el peronismo -de cualquier tendencia que sea- es el origen de todos los males del país, consigna aprobada por la mayoría de jóvenes de 20 a 35 años de la clase media argentina. Lo que habría que estudiar es si esta clase aumentó en esta década robada o descendió, discusión que quedará para los politólogos y sociólogos y sólo se sabrá en las próximas PASO. Más pragmáticos, los dirigentes radicales y Carrió y sus seguidores quieren llegar al poder y la ideología poco importa. Además, Macri no es la derecha, ni siquiera la centro derecha, sino más bien un conjunto de dirigentes unidos por los negocios, frivolidad y farándula. Y Carrió lo explicó en off hace poco, diciendo que el peronismo es una asociación ilícita penetrada por el narcotráfico y Macri es un corrupto pero no está ligado al narcotráfico. De ahí que concluiría que no le queda otra que apoyarlo para presidente y una vez que asuma marcarlo hombre a hombre para que no haga negociados de obras públicas. En tanto, los radicales que apoyan al jefe del PRO no tienen los pruritos de Carrió. Más bien todo lo contrario: desearían que Macri los integre a su red de negocios de infraestructura, ya que desde el gobierno de Raúl Alfonsín no gravitan y en el de Fernando de la Rúa se quedaron afuera. Con estas razones, apoyarían a Macri presidente sin mayores condicionamientos y además Jorge Brito, dueño del cuestionado Banco Macro, tiene indisolubles relaciones con el radicalismo, ya que se enriqueció durante el gobierno de Raúl Alfonsín de la mano de Fernando de Santibáñez y no olvida a quienes lo hicieron poderoso y rico. Tal es así que habría financiado las PASO de UNEN.