Macri y Massa ponen a sus espadas a coordinar el trabajo por la reforma electoral
Tras reconocer públicamente que hay cooperación entre sus equipos, ubicaron a Patricia Bullrich (Pro) y Graciela Camaño (FR) como fiscales de esa tarea común
El miércoles, Mauricio Macri y Sergio Massa se mostraron juntos, y con Margarita Stolbizer, para exigir "transparencia" al Gobierno en las elecciones de octubre. El jueves, los candidatos a presidente de Cambiemos y UNA hicieron confluir a sus diputados en el Congreso, para intentar reformas. Y ayer, los rivales salieron a los medios para ratificar esa voluntad compartida por modificar el sistema electoral o, por lo menos, hacerle pagar al kirchnerismo el costo político de una negativa.
Eso sí, como no faltan motivos para desconfiar de su nuevo "aliado", tanto el jefe de gobierno porteño como el diputado tigrense se encargaron de ubicar a sus espadas más filosas a coordinar esa tarea legislativa, y evitar que una zancadilla los sorprenda en el proceso. Macri eligió a Patricia Bullrich. Massa, a Graciela Camaño.
Ayer, el candidato de Cambiemos ratificó en entrevistas radiales el trabajo en colaboración con Massa. En diálogo con radio Vorterix y Mitre, admitió que "está trabajando en conjunto" con el postulante de UNA, aunque aclaró que se trata de un tarea con "todas las fuerzas de la oposición" y que no significaba un acuerdo electoral entre ambos. Prometió, cuanto menos, que en 2017 se votará con voto electrónico o, por lo menos, con boleta única.
Del mismo modo se expresó Massa, en diálogo con LA NACION. "Estamos trabajando juntos, pero en la reforma electoral", remarcó, sin dejar pasar la oportunidad para enviarle un dardo al candidato kirchnerista, Daniel Scioli. "Ojalá que él también se sume a la reforma electoral", acotó, un día después de haberle enviado una carta en la que le pidió no ser "cómplice" de un eventual fraude.
Tras recibir la misiva en su casa de Villa La Ñata, Scioli le habría "agradecido" el gesto a Massa, no sin ironía. Un amigo en común se encargó de entregar el mensaje.
Macri también apuntó al gobernador bonaerense. Señaló que le dio "mucha vergüenza" que Scioli "haya ido a Tucumán a avalar y a decir que fue un escrutinio impecable" el que le dio la victoria al candidato a gobernador kirchnerista, Juan Manzur. "Si hay vocación de Scioli de ser el ganador de un escrutinio que nadie discuta, él debería hacer que se sienten las autoridades actuales" para discutir el sistema", completó, en línea con otros dichos de Massa.
Esa "comunión" de ideas y gestos lejos está de haber bajado los niveles de desconfianza entre los rivales. Quedó en claro ayer, cuando ambos hicieron un movimiento de piezas para poner a sus espadas legislativas más filosas al frente del trabajo que venían coordinando (y que, en los hechos, seguirán desarrollando) otros diputados.
Por caso, Pablo Tonelli es quien coordina en los hechos la presentación que los legisladores de Pro harán el lunes en la comisión de Asuntos Constitucionales, para solicitar reformas en el sistema de voto. La misma tarea es encabezada en el massismo por el diputado Adrián Pérez, mientras que Omar Duclós lo hace en nombre de Progresistas y Mario Negri, por la UCR.
Ayer, sin embargo, Massa ubicó a Camaño, su jefa de campaña, como supervisora política de la tarea de Pérez. Macri replicó el gesto, designando a Bullrich como "veedora" del trabajo de su bloque. La socialista Alicia Ciciliani, por su parte, podría tener la misma función, en representación de Stolbizer.
"El trabajo principal seguirá en manos de los diputados con mayor conocimiento técnico en la materia y que ya presentaron proyectos de reforma, algunos en tándem. Bullrich y Camaño están ahí para evitar una avivada de la contraparte. O generarla", explicaba ayer, no sin ironías, uno de los legisladores al tanto de los movimientos.
BOLETA ÚNICA COMPLEMENTARIA
En medio de esas intrigas, que se explican por la necesidad de Macri y Massa de seducir a los votantes de su rival, sus equipos parlamentarios continúan buscando alternativas para reformar el sistema para los comicios del 25 de octubre.
A los proyectos presentados anteayer en el Congreso se sumará la Boleta Única Complementaria (BUC), una propuesta de la ONG Red Ser Fiscal. Como con la Boleta Única, se trata de una planilla con los nombres de todos los candidatos impresos, en la que el votante marca su elección. Lo novedoso es que la BUC puede ser entregada al votante por el presidente de mesa para cuando en el cuarto oscuro faltan o desaparecen las boletas de un partido.
La diputada Laura Alonso (Pro) busca por estas horas un mecanismo para que la BUC sea aceptada por el kirchnerismo, que domina Asuntos Constitucionales. "Podría aumentar la confianza en el proceso. A esta altura al que más le conviene es a Scioli. Hay mucho malestar ciudadano", interpretó.
EL DOBLE JUEGO DE RODRÍGUEZ SAÁ
- El candidato presidencial de Compromiso Federal, Adolfo Rodríguez Saá, dijo que no había sido invitado a la conferencia en la que la oposición, unida, reclamó elecciones transparentes tras el caso tucumano. Ese mismo día, su bloque legislativo votó con el kirchnerismo a las autoridades de la Agencia Federal de Inteligencia.
